Estados Unidos. Así expolia y masacra.
Agenda
Irán 1951- 1979
Primera Intervención encubierta tras la II Guerra Mundial
-I de II-
En 1941 Churchill dijo: “Nosotros lo pusimos, nosotros lo quitamos” refiriéndose a como habían sustituido al rey de Irán, Reza Shah, por su heredero Mohamed Reza Pahlevi. Desde que en 1908 se descubriera el petróleo en este país, la compañía inglesa de petróleo, la Anglo-Iranian Oil Company, venía controlando su perforación, extracción y venta.
Cuando este rey se puso del lado de la Alemania nazi, los imperialistas británicos, temiendo perder el petróleo iraní, le obligaron a abdicar en favor de su hijo y los nazis fueron expulsados del país.
El control que los británicos venían ejerciendo sobre la concesión petrolera era insultante para el orgullo nacional iraní. No permitían que sus libros de cuentas fueran auditados para comprobar si al gobierno iraní se le pagaba lo acordado. Liderados por Mosaddegh, ministro del sha, los partidos nacionalistas y otros opositores a la monarquía autoritarita, se habían coaligado en el Frente Nacional, siendo la nacionalización del petróleo su objetivo político principal. Cuando en 1951, Mosaddegh accedió a la presidencia del gobierno, el petróleo fue nacionalizado y la compañía inglesa fue expulsada. Esto le trajo un apoyo popular generalizado, incluido el apoyo de los comunistas, organizados en el Partido Comunista Tudeh (“masas” en persa). La nacionalización hizo que los iraníes sintieran, por primera vez en siglos, que se estaban ocupando de los asuntos de su país y que esto les traería un mayor bienestar.
Gran Bretaña instigó un boicot mundial al petróleo iraní además de utilizar agentes iraníes para socavar el gobierno de Mosaddegh. La nacionalizada compañía de petróleo (National Iranian Oil Company) sufrió una disminución de la producción, debido a la inexperiencia iraní y el boicot de los técnicos británicos. Gran Bretaña prohibió la exportación a Irán de productos británicos básicos, como el azúcar y el acero, congelaron las cuentas en divisas de Irán en los bancos británicos. Cualquier barco que transportara petróleo iraní era confiscado por la Royal Navy, detenido por transportar lo que ellos llamaban «propiedad robada»…
Hacia 1953, los problemas económicos y sociales causados por el embargo británico estaban surtiendo efecto: la coalición de Mosaddegh se estaba deshilachando; la agitación y la violencia política se generalizaba produciéndose enfrentamientos en las calles. El bloqueo británico de los puertos iraníes había dejado a Irán sin acceso a los mercados donde vender su petróleo. El país, con las refinerías paradas y decenas de miles de obreros en el paro, entró en bancarrota.
Entre los partidarios del golpe de estado figuraban los partidarios del sha y los del ayatolá Kashani. Estos últimos, si bien en principio apoyaron la nacionalización, tras comprobar que un Mosaddegh laico, no iba a permitir que se creara el estado islámico que pretendían, cambiaron de bando.
Los agentes británicos infiltrados, apoyados por los de la CIA y desplegados por todo el país, sobornaron a diputados, candidatos y jefes regionales para que votasen por la destitución de Mosaddegh. “Sería un golpe realizado por medios aparentemente legales”. … /…
Continúa el domingo 11 de agosto.