Movimiento obrero. Su brutal situación:
Huelgas:
-Los trabajadores de Secomsa en Botarell, Tarragona, en huelga por mejoras laborales.
Será huelga indefinida hasta que no se consigan «la totalidad» de los cambios que exigen a la empresa. Entre otros, destaca la recuperación del poder adquisitivo perdido desde el 2012, una mejora de las condiciones laborales y de seguridad, la creación de nuevos puestos de trabajo y más mantenimiento de la maquinaria. Desde el sindicato CGT afirman que 120 (un 75%) de los 160 trabajadores se han adherido a la huelga.
Un centenar de trabajadores de la planta de compostaje de Secomsa en Botarell (Baix Camp) se concentraron el 2 de septiembre en las puertas del consejo comarcal en Reus para exigir mejoras laborales y salariales. Lo hicieron coincidiendo con el primer día de huelga indefinida.
Lucha ante cierres:
-Trabajadoras CAC Málaga, en lucha, contra 27 despidos.
Las trabajadoras del CAC (Centro de Arte Contemporáneo) de Málaga, movilizándose ante el anuncio del Ayuntamiento de cierre por reformas a partir del 18 de septiembre y no garantizar el empleo de la actual plantilla, compuesta mayoritariamente por mujeres y trabajadores con alguna discapacidad.
La reunión celebrada con el alcalde y la concejala en agosto, que provocó la desactivación de las movilizaciones del colectivo durante la pasada feria de Málaga, solo ha servido para hacer perder el tiempo a la plantilla, dado que ninguna solución o propuesta de arreglo ha partido de los responsables municipales.
El 6 de septiembre realizaron una primera concentración de denuncia.
El 18 de este mes concluye el contrato de gestión del Centro de Arte Contemporáneo (CAC) por parte de la empresa Gestión Cultural y Comunicación tras años de debate público y millonarios costes municipales. Según el Ayuntamiento, el CAC cerrará por obras y se impulsará un nuevo proyecto, de gestión municipal, del que poco o nada se sabe.
Las 27 personas que trabajan en CAC, que son su cara visible y que lo han sostenido estos años pese a la mala gestión de la empresa, pueden quedarse en la calle ante el desentendimiento de la empresa saliente y de la que por ley debe subrogar como empresa principal, Ayto. de Málaga, situación que está llevando a la plantilla a la desesperación ante la incertidumbre provocada.
La asamblea de las personas trabajadoras debate cómo dar continuidad a la concentración del 6 de septiembre sin descartar ninguna opción u acción.
Situación real:
-Los despidos colectivos crecieron un 51,9% en junio, en comparación con el mismo mes del año anterior, alcanzando a 4.040 trabajadores, superando incluso la cifra de mayo, cuando se vieron afectos más de 3.000 trabajadores. según datos del Ministerio de Trabajo.
*Además de los despidos colectivos, las suspensiones de contrato también vieron un incremento notable del 73,3%, afectando a 12.856 trabajadores. En contraste, los procedimientos de reducción de jornada disminuyeron un 31,8%, con 595 trabajadores afectados.
El sector de la construcción fue el más afectado, multiplicando por más de ocho los despidos colectivos, alcanzando 334 trabajadores. Por otro lado, en la agricultura, los afectados por despidos colectivos se triplicaron respecto al año anterior, sumando 87 trabajadores. Navarra fue la más afectada con 6.330 trabajadores, la mayoría de ellos por suspensiones de contrato. Andalucía, Cataluña y Madrid también registraron altos números de afectados, con 2.470, 1.563 y 1.498 trabajadores, respectivamente.
En estos datos no se incluyen los posibles despidos colectivos encubiertos, aquellos despidos objetivos que realizan las empresas como despidos individuales a los trabajadores, pero que afectan a un gran número de trabajadores en un periodo de tiempo.
El Ministerio de Trabajo, como siempre, subraya que, aunque el número de afectados por ERE ha aumentado, “sigue siendo bajo en comparación con el total de afiliados a la Seguridad Social”.
Esquilmación consentida:
-Fondo buitre yanqui embarga todos los bienes de una localidad andaluza, Burguillos.
En mayo supimos que un fondo buitre se había quedado con la deuda de Burguillos, un pueblo de 6.500 habitantes de la provincia de Sevilla. El fondo en cuestión se trata de KSAC Europe Investments, con sede en Luxemburgo pero perteneciente a la sociedad norteamericana King Street, que adquirió la deuda del Ayuntamiento, de 27 millones de euros, pagando siete millones a los bancos que poseían dicha deuda.
El 20 de agosto, en sesión extraordinaria, el Ayuntamiento decidió el pago de 2,5 millones de euros a este fondo buitre de Nueva York que tiene embargada a toda esta localidad, pero será solo el primer pago de muchos más que vendrán hasta devolver los 27 millones. El Consistorio ha tenido que detraer la mitad de su presupuesto anual (5 millones) para pagar la deuda a los capitalistas.
Para eso sirven las instituciones políticas bajo este sistema económico.
En consecuencia, el pueblo, que ha quedado literalmente en manos del fondo de inversión, ha tenido que cancelar la obra del recinto ferial y el nuevo polideportivo para los jóvenes que estaba proyectado. La construcción de una piscina para los vecinos también ha sido paralizada y el plan de ayuda al empleo, que recién se estaba iniciando, ha sido cancelado. Se estima que la deuda no podrá ser subsanada hasta dentro de muchos años.
Sin embargo, la cantidad abonada no ha aplacado las ansias de la oligarquía; de hecho, el fondo buitre ha presentado una demanda para embargar bienes del municipio hasta que la deuda sea saldada. De modo que el Consistorio tendrá que poner a disposición de un juzgado todos los bienes patrimoniales del ayuntamiento, como solares, viviendas públicas o parcelas rústicas (incluyendo las tierras de cultivo, secano y monte que rodean a la localidad).
Ante esta situación, el actual alcalde, del PP, le echa las culpas al anterior alcalde, del PSOE, por adquirir una deuda excesiva. Y los sucesores del anterior alcalde, del PSOE, le echan la culpa al actual alcalde, del PP, por permitir que el fondo buitre embargue el pueblo.
Para este circo ha quedado la “democracia” burguesa: ninguno de ellos (ni tampoco ninguno de los medios de comunicación que se han hecho eco de la noticia) declara que los vecinos y los trabajadores van primero y que no hay que pagarle ni un solo euro más a un fondo mafioso, ladrón y criminal.
Lo que le ha pasado a Burguillos no es una anécdota ni una excepción. Los fondos buitres, que han llegado para desmantelar aún más el país, son los extranjeros que sobran, y no los trabajadores inmigrantes que vienen aquí a buscarse la vida, por más que quiera lavarnos la cabeza Elon Musk.
Porque estos fondos representan el parasitismo inversionista y bancario hacia el que vamos: se quedarán con nuestras viviendas, con nuestros hospitales públicos, con nuestros locales, con nuestros negocios o pequeñas empresas y con nuestras pensiones… si no conformamos un frente amplio antioligárquico para justamente hacerles frente.
–https://insurgente.org/fondo-buitre-yanqui-embarga-todos-los-bienes-de-una-localidad-andaluza/