Hola majxs! (…) Por aquí, tratando de no morir asfixiada, con un calor enorme y sin apenas poder dormir de la chicharra. No, no me gusta este clima. En invierno, frío y viento y ni una gota de lluvia, y en verano un calor achicharrante. Si teníais pensado regalarme un chalecito por aquí, no lo quiero, jaja.
Sobre el tema gastronómico que preguntábais: sí, aquí la comida deja bastante que desear, y por tanto se come mal. Por ejemplo en Villena y otras cárceles al menos daban más ensaladas, pero aquí desconocemos lo que es el maiz, la remolacha… Mucha patata y más patata (y dura algunas veces), que no hay quien se las trague. El desequilibrio es total, carne a patadas -mucha de esa preparada, como aglomerada-, verdura poca, fruta una al día (y solo manzanas, la reina del lugar)… Y a eso se suma la gran dificultad de no poder comprar algún complemento en el economato y/o demandadero. El 2º no existe (solo hay ropa cara y cuatro productos de higiene), y en el economato hay latas y embutido. Hemos pedido varias veces que traigan más productos (avellanas, nueces, muesli…) pero “que si quieres arroz Catalina”. Y ponen la excusa de que si la cárcel está alejada, que si los comerciales no vienen…
Sobre las relaciones: aquí estoy con una presa política vasca y una presa anarquista con las que poder hablar, porque lo demás es sobrevivencia en un sistema penitenciario que potencia el chivateo, la delación, el nulo compañerismo. Aquí les inculcan la doctrina del “sálvese quien pueda”. Hablan de respeto y más respeto, pero su ejemplo diario dice miedo, terror, egoísmo, individualismo atroz… Aquí, bastante triunfo tienen las sociales si logran salir íntegras, sin corromperse. Algunas presas no tienen principios ni dignidad personal. Pero aquí hay mucha gente que seguro les educaron y se criaron de otra forma, más honesta, y será un verdadero triunfo que salgan de aquí igual o lo menos dañadas posible. La reinserción, puro cuento chino.
Sobre “en qué empleo el tiempo libre”, pues deciros que intento hacer bastante deporte, un poco de cotorreo y algo de manualidades (muy poco) a las mañanas. A las tardes estudio, leo bastante y escribo cartas (las pocas que nos dejan). Antes, en el polideportivo se podía hacer voleibol y fútbol sala. En enero vino director nuevo y nos ha prohibido toda actividad fuera del módulo. A las FIES-3, pues debemos ser gente peligrosa que necesita vigilancia extrema. Así que nada de salir del módulo. Como no hay actividad, pues hay que organizarse la vida con las cosas de siempre, sobre todo el estudio y lectura.
Situación con David (Garaboa) tras la nueva dispersión: Hablo con él 2 veces al mes, cinco minutos escasos cada vez. Dudo mucho que nos vuelvan a juntar, pues ya veis que se pasaron el auto del J.V.P. de estancia en Villena… por ahí.
(…) Y el tema de las denuncias desde Europa, leyes Parot, torturas… todo por el mismo sitio. La realidad es muy tozuda.
Bueno, cuidaros mucho, recibid un abrazo solidario y gracias por vuestro interés.