Memoria Histórica necesaria
El brutal asesinato de Carmen Díaz Ramos
Sobre el asesinato fascista de la hermana del dirigente del PCE José Díaz.
Según la nota biográfica de su familiar Carmen León Vela. Fue fusilada el 8 de noviembre de 1936 por ser hermana del dirigente comunista. Nos han enviado esta forma de texto, movido en las redes sociales. (Abajo, el texto, seguido).
La hermana de quien fuera secretario general del Partido Comunista, José Díaz, que se suicidó en Tbilisi (Gerogia) en 1945 (José Díaz, el dirigente olvidado del comunismo español), se llamaba Carmen Díaz Ramos y nació en Sevilla en 1891, hja del panadero José Díaz Alvarado. Fue cigarrera en la Fábrica de Tabacos de su ciudad natal, hasta que se casó en 1888 con Francisco Vela Ortega. En 1928 falleció en un accidente su marido, con el que tuvo cinco hijos. Según cuenta Carmen León Vela en una breve nota biográfica, Carmen y su hija Francisca, que tuvo que dejar el colegio, se dedicaron a vender el pan que su hermano Pepe, panadero, les hacía fuera de su jornada laboral.Tras el golpe militar del 18 de julio de 1936, ante el recrudecimiento de la represión, y siguiendo las recomendaciones de algunos camaradas y amigos de su hermano, decidió abandonar la ciudad con cuatro de sus cinco hijos, pues uno de ellos se encontraba en Madrid con su tío. Encontraron habitación en la casa de una mujer, adonde muy pronto llegaría la policía preguntando por las hermanas de Pepe Díaz y con amenazas de matar allí mismo en la calle a un niño que jugaba si no se presentaban, escribe León Vela. Fue entonces cuando Carmen decidió salir y entregarse, siendo detenida junto a su hija Francisca y su hermana Concha, a la que se llevaron con su hija, a la que aún amamantaba. Los demás se quedaron con la mujer que las había cogido. Carmen y su hermana estuvieron detenidas en el cine Jáuregui, contiguo a la comisaría y que utilizaban como depósito de presos al estar los calabozos llenos. De allí serían trasladadas a la Prisión Provincial y el 4 de noviembre a la residencia de los jesuitas de la calle Jesús del Gran Poder, donde estaba instalada la delegación de Orden Público y que hasta el día 12 de ese mes dirigiría el capitán Manuel Díaz Criado.
Durante varios días, y antes de entrar al trabajo, Francisca estuvo llevándole diariamente la comida a su madre y a su tía, hasta el día 8, cuando le dijeron que ya no hacía falta que la llevara pues a su madre la habían fusilado esa madrugada y su tía había sido trasladada con la niña a la comisaría de la calle Jesús (actualmente Jesús de la Vera Cruz), donde podría verla al día siguiente. Uno de los guardias comentó: a ver si con esto tu tío se calla de una puta vez. Expresión que casi con total seguridad se referiría al discurso que Pepe Díaz había dado dos días antes en la Plaza de Toros de Madrid, cuenta en su nota Carmen León Vela, familiar de la asesinada.
Cuando Francisca fue a la comisaría de la calle Jesús, su tía le pudo narrar las circunstancias de la muerte de su madre. La policía les había dicho que una de las dos caería esa noche, así que a elegir y rápido. Discutieron entre ambas hermanas sobre quién debería morir. Finalmente Carmen, diez años mayor que Concha, le dijo a ésta que cuidara de sus hijos y se adelantó aprovechando que la niña pequeña se puso a llorar. Concha le contó a Francisca cómo su madre se dirigió a los guardias diciéndoles que le dispararan pronto y no me vendéis los ojos, que mi hermano se merece que muera con la cabeza muy alta.La llevaron junto a un numeroso grupo a las tapias del cementerio de Sevilla, donde un piquete de regulares acabó con su vida. Carmen Díaz Ramos fue asesinada exclusivamente por ser hermana del secretario general del Partido Comunista de España
Casi cuarenta años después del fallecimiento del dictador, transcurridos casi otros tantos desde la instauración del vigente periodo democrático y seis desde la aprobación de la más que alicorta Ley de Memoria Histórica, nadie sabe dónde están enterrados los restos de Carmen Díaz Ramos, asesinada por el franquismo por ser hermana del secretario general del Partido Comunista de España. Presupongo el sentimiento de sus descendientes ante esta ignominia, tal como lo deja intuir la emotiva nota biográfica de Carmen León Vela.