Internacional:
Haití
-Uno de los asesinos del Presidente de Haití, Jovenel Moise, ha sido informante de la DEA, Agencia de Control de Drogas de Estados Unidos.
Al menos dos ciudadanos estadounidenses, Joseph Vincent, de 55 años, y James Solages, de 35, han sido detenidos en relación con el magnicidio. Un tercer haitiano-estadounidense, Christian Emmanuel Sanon, ya arrestado, las autoridades de Haití lo señalan como el responsable principal del asesinato. Hay otros 18 detenidos.
Cuba
-Ahogarse en miel
Lenin, en su «El Estado y la revolución», ya nos dio una lección impagable: advertía que la clase dominante, y sus representantes mediáticos, académicos y políticos, practican el arte de distorsionar a los revolucionarios y a las grandes ideas revolucionarias -«sometidas a persecuciones y acogida su doctrina con la rabia más salvaje»- y después de la muerte de quienes eran combatidos «se les convierte en iconos inofensivos (…) rodeando sus nombres de cierta aureola de gloria para consolar y engañar a las clases oprimidas».
El ejemplo del Ché es evidente. Y dentro de los movimientos de liberación de podrían poder decenas de ejemplos, siendo hoy el más notable el de los kurdos, o las kurdas, por ejemplo, con todo su rollete de autogestión cuando son simples peones geopolíticos de EEUU sin que esto permee, curiosamente, ni un ápice de su aureola «revolucionaria». O del BLM.
El capital ha invertido dinero, tiempo y esfuerzo en esta campaña. Han sido años de trabajo, de financiación de organizaciones, de asunción de un discurso clásico de la izquierda que ha sido vaciado de todo contenido (solidaridad, compromiso, compañerismo, igualdad…) que ha vaciado a la misma izquierda de sus pretensiones y aspiraciones hasta hacerse otro apéndice más de la burguesía.
Nosotros mismos asumimos alegremente todo esto. Somos como la abeja que se ahoga en miel.
Algo de eso es lo que pasa en Cuba. Desde hace tiempo ya no se acompaña eso de que toda difusión de conciencia tiene que ir acompañada de la acción. Ha tenido que producirse un estallido, en un momento muy concreto, para que se reaccione. Como se tiene muy cercano el ejemplo de China, es un buen espejo en el que mirarse. Allí la militancia del PCCh fue la primera en dar la cara contra el coronavirus, fue la primera en ayudar en el entorno social y en ayudar y completar las medidas impulsadas por el gobierno.
La concienciación ha sido siempre el primer paso para apoyar cualquier tema: o profundizando en él contribuyendo a su análisis y estudio, o trabajando activamente sacrificando tiempo en apoyo de la causa. Cuando eso desaparece, aparece el peligro. En Venezuela lo vieron y lo hicieron (tarde, pero lo hicieron).
En Cuba ha habido excesiva laxitud, confiando en el indudable éxito de las vacunas que muy pronto tendrán el ciclo completo de investigación y difusión. Pero el bloqueo (que sigue con Biden) y las consecuencias del coronavirus dejaban un fácil caldo de cultivo para la agresión. Y se ha utilizado. Ha habido gente que se ha dejado seducir hastiada de apagones y de dificultades económicas, gente agotada y desorientada por lo que está ocurriendo. Las manifestaciones son las más numerosas desde los años 90, cuando Cuba vivía (casi es un decir) asociada al colapso soviético. Entonces los militantes comunistas fueron la vanguardia en casi todo. Y el «período especial», duro, muy duro, se pudo superar. Ahora la militancia no ha actuado como vanguardia, ha estado adormecida y ha sido sorprendida. La reacción es buena, pero tiene que ser sostenida en el tiempo y, sobre todo, fortalecida hasta que las vacunas estén operativas.
Porque aquí voy a introducir una variante que me parece interesante: el hecho de que la vacuna Abdala esté a punto de ser operativa (con una eficiencia tan alta o más que la rusa Sputnik o la estadounidense Pfizer) puede convertir a la isla en un puntal entre los países que están siendo postergados en el reparto y distribución de vacunas (o sea, todos los no occidentales). Eso se traduce, también, en dinero con el que Cuba puede paliar su difícil situación. Y eso es lo que había que impedir.
Puede que sea casual o puede que no (y yo soy muy mal pensado), pero las manifestaciones se han producido en sitios donde más casos de COVID-19 ha habido. Se han producido en sitios que se corresponden con el estallido de la pandemia en Cuba. Díaz Canel ha hecho bien yendo allí y abordándolo in situ con la gente.
No tiene que haber un estancamiento entre el discurso y las actitudes. Cuba es fuerte y tiene en su mano una herramienta vital, algo que conlleva más fuerza para enfrentar el desafío. Pero para ello ya no basta con la resistencia, ni con contentarse con las votaciones de la ONU contra el bloqueo. Eso es contentarse con mirar el bote de miel, porque la abeja que no hace su labor y se contenta con mirarlo también se puede caer en él y ahogarse.
–https://elterritoriodellince.blogspot.com/2021/07/ahogarse-en-miel-lenin-en-su-estado-y.html?m=1
-Agustín Antonetti, un cachorro del fascismo detrás de la campaña «SOSCuba»
Investigación confirma la perversa operación de redes sociales contra Cuba lanzada desde el exterior.
Georges Abdallah
-Todos a Lannemezan para la manifestación del 23 de octubre de 2021 por la liberación de Georges Abdallah
Mes internacional de acciones por Abdallah, del 24 septiembre al 23 octubre.
–https://www.facebook.com/events/868201664054033/
Recuperando material histórico:
-Llamamiento que la madre de Dimitrov hace a la solidaridad internacional con respecto al proceso de los jóvenes negros de Scotsboro.
Carta publicada en la revista “Unión Tabacalera”, nº 152, de julio de 1934. Órgano de la Confederación de la Industria del Tabaco.
A las masas trabajadoras del mundo entero:
Vuestras numerosas intervenciones de solidaridad, vuestras asambleas de protesta y demostraciones en todos los rincones del mundo, vuestro movimiento poderoso dirigido hacia la prestación de ayuda a las víctimas de los crímenes de la justicia en el proceso por el incendio del Reichstag, ha obligado a Hitler a poner en libertad a Tanef, Popof y a mi hijo Dimitrof. No encuentro palabras para manifestar mi reconocimiento y que me han hecho muy feliz. Vosotros obligasteis al Tribunal a declarar la inocencia de los acusados y cuando Hering declaró que él tenía la intención de mantenerlos encerrados en la cárcel, vuestra poderosa protesta y el asilo concedido por la Unión Soviética a Dimitrof, Popof y Tanef, junto con la ciudadanía soviética que los convirtió en ciudadanos de la patria de los trabajadores, abrieron ante ellos las puertas de la cárcel. Vosotros me habéis demostrado cuán grande es el poder de la solidaridad internacional. Ella puede paralizar las manos de los verdugos. Ella abre las puertas de la cárcel. Gracias a vosotros, esta seguridad se ha arraigado profundamente en mi conciencia.
Ahora yo quiero levantar mi voz en defensa de los nueve jóvenes inocentes de Scotsboro, en los Estados Unidos. Llevan sufriendo más de tres años de cárcel en Alabama, continuamente amenazados de muerte en la silla eléctrica o bien por el linchamiento, por parte de una multitud ávida de sangre proletaria. Toda esperanza de salvación está en la solidaridad internacional.
Dos de estos dos jóvenes, Hayvood y Patterson fueron condenados nuevamente a muerte. El Tribunal Supremo recibió la declaración en contra de esta sentencia. La ejecución se espera de un día para otro.
El Socorro Rojo, que ha prestado una ayuda tan valiosa en la obra de la organización y realización de un movimiento internacional de protesta por la libertad de Giorgio y de sus dos compañeros lleva a cabo ya durante varios años la campaña de Scotsboro y llama constantemente a reforzar el movimiento de protestas en defensa de los jóvenes negros de Scotsboro.
Cuando Ana Raith, dos años atrás estuvo en Bulgaria para hacer un llamamiento a los obreros y campesinos de nuestro país para salvar la vida de dos de sus hijos y de los demás jóvenes negros, yo sentía admiración por esta valerosa mujer que había viajado a través de Europa para intentar levantar a las masas contra el asesinato legalizado que se estaba perpetrando. Y cuando se cernió sobre mí la amenaza de perder a mi hijo, yo me sentí ligada todavía más fuertemente a Ana Raith.
Por esto yo, madre de Giorgio Dimitrof, os llamo a vosotros trabajadores del mundo entero, a adherirse a este movimiento exigiendo la libertad inmediata incondicional y garantizada de los jóvenes negros injustamente condenados.
Vosotros que protestáis contra el terror fascista que reina en Alemania y en Austria, levantad vuestra voz también contra el terror de la ley de Lynch dirigida contra los negros trabajadores de los Estados Unidos. Exigid la libertad de Thaelmann, guía del Partido Comunista de Alemania, y de Decenas de miles de compañeros que sufren en las cárceles y los campos de concentración de Alemania y Austria.
Exigid la libertad de los jóvenes negros de Scotsboro.
Enviad cartas y resoluciones al Presidente Roosevelt, en Washington y al Tribunal Supremo de Alabama en Montgomery, y exigid la libertad inmediata de estos jóvenes inocentes.
Haced para las madres de los jóvenes negros de Scotsboro lo mismo que habéis hecho por mí. Devolvedles a sus hijos. La solidaridad internacional puede y debe conseguir esto.
Paraskeva Dimitrova.