Mujeres luchadoras y sabias
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Wang Zhenyi
China 1768 – 1797
Fue una destacada científica de la dinastía Qing. Cuando nació, China contaba con un estricto sistema feudal: la educación era posible solo para los adinerados y las mujeres no tenían derechos legales ni recibían formación fuera de las tareas domésticas. Sin embargo, Zhenyi se las arregló para convertirse en una matemática, astrónoma, escritora de libros de texto y poetisa; su abuela le enseñó poesía, su abuelo astronomía y su padre medicina, geografía y matemáticas.
Zhenyi tenía sus propias teorías sobre el funcionamiento de los eclipses, estudió el sistema del calendario chino y utilizó su telescopio para medir las estrellas y explicar la rotación del sistema solar. Una de sus contribuciones fue la de lograr describir su visión de los fenómenos celestes en su artículo Sobre la procesión de los equinoccios.
En el ámbito matemático, Zhenyi dominaba la trigonometría y escribió el artículo La explicación del Teorema de Pitágoras y la trigonometría. Pero, no solo se dedicaba a estudiar y a describir, también le dedicó tiempo a facilitar el estudio a las siguientes generaciones; para ello, reescribió los libros en un lenguaje más sencillo y simplificó las multiplicaciones y divisiones para hacer que las matemáticas fueran más fáciles y divertidas.
Además, escribió poemas sobre las injusticias: creía en la igualdad de hombres y mujeres y en el derecho de estas a estudiar. Uno de sus poemas es:
Se hace saber,
que las mujeres son iguales que los hombres;
¿No estás convencido,
de que las Hijas también pueden ser heroínas?
Formuló frases como:
“Cuando se habla sobre el aprendizaje y las ciencias, la gente no piensa en las mujeres.”
“Las mujeres no solo deberían cocinar y coser, y no se las debería de molestar por escribir artículos para publicarlos, estudiar historia, componer poemas o hacer caligrafía.”
Pese a que solo vivió 29 años, Zhenyi es considerada una de las grandes mentes de la dinastía Qing. Antes de morir, le dejó a su amiga Kuai, todos sus trabajos y manuscritos. Kuai, comprendiendo la importancia de estos trabajos, se los donó a un famoso erudito de aquella época. Este, tras leerlos y analizarlos, consideró a Zhenyi como “la mujer erudita número uno después de Ban Zhao”, (Ban Zhao fue una escritora, historiadora e intelectual china).