Topas. Abril 2016
Las jornadas por la amnistía celebradas en Madrid hace unos días han salido bien, lo que supone un pasito mas para consolidar la vía de la resistencia, pues creo que hace un par de semanas también hubo otras en Bilbao en las que suspendieron un concierto de Hassel e hicieron una manifestación bastante numerosa. Y bueno se aprecia un cierto avance en esa dirección.
Claro que los procesos de lucha, como todo en la vida, también se desarrollan con contradicciones y hay cierta gente que pretende dividir a los presos políticos por periodos o ciertas características en función de que seamos anteriores o posteriores al llamado 15m, algo realmente deleznable y que en realidad hace el juego al régimen fascista. Solo piden amnistía para los presos políticos posteriores al 15M.
Aunque no he escuchado sus argumentos supongo que la cosa tendrá relación con que a unos se nos achaca ser mas <violentos o terroristas> que otros, olvidando que el único terrorismo que hay en este país es el que impone el Estado al pueblo, y que este no solo tiene el derecho sino también el deber de defenderse. Sin embargo, tampoco tienen en cuenta que para este Estado todos los que nos oponemos y criticamos su represión y sus medidas para expoliar a los trabajadores, somos unos terroristas; y eso que a los que vienen condenando en protestas les acusan nada menos que por <atentado> a la autoridad>, por el hecho de manifestarse. Hace unas semanas que condenaron a 3 años y medio de prisión a un sindicalista del SAT y están encausados más de 300 trabajadores por lo mismo.
Pero es preciso que se sepa que a mí mismo la primera vez me condenaron a 3 años por hacer una barricada con un pino, y luego llego otra de otros tres por asociación ilícita, por militar en un partido comunista que pretende derrocar al capitalismo e implantar el socialismo. Y a otros camaradas también les condenaron a similares años de prisión por cuestiones parecidas o <propaganda ilegal>. Sin embargo, con la llegada de Aznar al gobierno y la imposición de la <ley de partidos> cambiaron las cosas a peor, y el hecho de militar en el PCEr ya supone una condena de unos 8 años o más, de prisión por <pertenencia a banda armada>, más otros tres por documentación falsa, que tenemos que utilizar para poder difundir nuestra línea política y nuestro programa.
Por otra parte, en relación a la lucha por amnistía, también es muy importante la división que se ha producido en el movimiento Abertzale con el surgimiento de ATA, que pretende seguir desarrollando el movimiento pro-amnistía. En relación a esto cada vez hay más presos políticos vascos que con la consigna <No en mi nombre>, se vienen desmarcando de la línea oficial del colectivo de presos políticos abertales, que les llevo a la cárcel, así como a su carácter de presos políticos, para aceptar la legalidad penitenciaria común y tratar de salir de prisión por los resquicios que ofrecen a los presos sociales. Mas encima tratan de justificar esa claudicación señalando que el régimen <no está dispuesto a conceder la amnistía>, como si esta se hubiese conseguido alguna vez sin una larga y consecuente lucha.
En consecuencia con ello, es normal que el movimiento abertzale oficial este perdiendo cada vez más apoyos, tanto en las urnas como fuera de ellas, al tiempo que ATA va ganando fuerza y se va consolidando. Y es importante tener presente que sin conseguir la amnistía no es posible conquistar el mínimo resquicio de democracia, incluido el derecho a la autodeterminación de las nacionalidades. Es una burla al pueblo vasco que Bildu hable de alcanzar la independencia sin antes arrancar al fascismo, la amnistía. Ya está viendo en Cataluña que la vía de la llamada <unilateralidad> no funciona si no va acompañada de la desobediencia civil y la lucha consecuente del pueblo, saltando por encima de la legalidad.