El Gobierno utiliza a miembros de la Guardia Civil como esquiroles, y vulnera el derecho a la huelga
Los trabajadores de Eulen rechazaron la propuesta de mediación presentada por la Generalitat, que incluía un aumento salarial de 200 euros por doce pagas. Lo hicieron mediante votación el día 13, lo que significa que seguirán adelante con sus protestas.
El ejecutivo franquista ha cumplido su amenaza. Finalmente ha recurrido a la Guardia Civil, que ya ejercen en el aeropuerto barcelonés su labor de esquiroles. Estos se han hecho con el control de la seguridad de los arcos, y, si a esto le añadimos que el “democrático” Gobierno español exige a los trabajadores el cumplimiento del 90% de su labor, aduciendo a la obligatoriedad de los servicios mínimos, estaríamos hablando de una flagrante violación del derecho a la huelga.
El abogado de los trabajadores, Leopoldo García Quinteiro, calificó de abusivos los servicios mínimos fijados por el Gobierno, y criticó la actitud del ejecutivo porque “mientras no se quiebren los servicios mínimos no se puede ir al arbitraje obligatorio”. El letrado señaló que esta fórmula surgió de “una ley franquista” cuyo “vigor ha quedado claramente desautorizado por las sentencias del Tribunal Constitucional”.
Leopoldo García añadió que “la imposición del arbitraje obligatorio es una anomalía absoluta y un atentado directo al derecho fundamental a la huelga”.
Se debe saber que el Grupo Eulen ganó el año pasado 14 millones de euros, 65% más que el anterior. Sin embargo, los responsables de la empresa dicen que los trabajadores piden demasiado.
En: Insurgente