Cartas desde prisión
Lucio García Blanco
Topas, 6-8-2017
(…) Me alegro de recibir tu carta, pero si bien he tenido unos meses en los que me llegaba poco correo, llevo dos semanas en las que se me ha acumulado un montón, y también ando ocupado con un artículo para “El Otro País”. Con respecto a si puedes enviarme artículos de internet, sí se puede hacer, porque me están llegando desde distintos puntos. A pesar de tanta traba y restricciones, me está llegando bastante información.
Las peticiones judiciales de hasta 50 años de cárcel para algunos de los chavales de Altsasu que tuvieron una pelea con guardias civiles es algo de escándalo, incluso en esta España fascista donde bien se puede decir, que han superado a Franco, ya que el preso que más cárcel pagó en su etapa se pasó 23 años en ella. Ahora hay muchos presos políticos y sociales que tienen que cumplir 40 años de prisión y encima han impuesto la cadena perpetua que tienen la caradura de llamar revisable a partir de los 30 años cumplidos. En algunos países de Europa esa revisión la hacen a los 15 años y en otros a los 20, y es muy raro que algún preso pase de ésta última cifra, aunque los hay.
Pero no solo han dado un salto cualitativo respecto a la gravedad de las condenas por motivos políticos, sino que también lo han dado en relación al número de encarcelamientos, como demuestra el caso de la operación Araña, el acoso a los cantantes de rap o las penas judiciales por participar en manifestaciones o huelgas, así como en el proceso catalán.
Claro que toda esa actuación de excepción se debe claramente a la gran debilidad en que se encuentra el régimen y la grave crisis política que sufre el Estado y sus instituciones y partidos políticos, cada vez más desprestigiados y aislados. Pero también al gran desafío democrático que supone la convocatoria del referéndum de autodeterminación en Catalunya, y el cierto avance que se viene dando en la reorganización y las protestas del movimiento antirrepresivo y la lucha por la amnistía. Y es evidente que este panorama va a desembocar en un gran choque entre el pueblo catalán y el Estado que va a dejar a éste al borde de la descomposición y asimismo va a crear muy buenas condiciones para desarrollar la unidad entre los colectivos antifascistas y revolucionarios por toda España, así como para impulsar la lucha por el programa democrático de ruptura con el fascismo.
Es bastante interesante que tanto el grupo de Colau como el de los podemitas, el primero apoyando el referéndum y el segundo dando libertad a sus seguidores para que puedan votar si quieren, hayan dado la espalda a la posición reaccionaria de Iglesias de “pedir un referéndum pactado con el Estado”, lo que en realidad supone boicotear el referéndum catalán. Claro que lo de los primeros es una oposición oportunista para no quedarse aislados y no perder votantes, que refleja que el pueblo catalán está volcado por ejercer su derecho a la autodeterminación.
Y sobre Euskal Herria, aunque no tengo casi información, creo que Bildu apenas se está moviendo por la cuestión, y esto le pasará factura allí.
Otro tema importante a tener en cuenta es la probable influencia que pueda tener en este asunto la situación internacional, con las grandes potencias enfrentadas en dos grupos desde hace tiempo en todos los terrenos, incluido el militar, como ha ocurrido en Siria; así que no sería nada raro que el grupo abanderado por Rusia y China pudiese apoyar a Cataluña, aunque es lógico que se tomase su tiempo en hacerlo y a posteriori, y que antes lo hagan otros pequeños países.
Donde creo que también viene siendo importante el apoyo de estas dos grandes potencias es en Venezuela, pues como es evidente el imperialismo está haciendo todo lo posible por acabar con la revolución chavista. La cuestión aquí es que Maduro y compañía, no aprovecharon el periodo favorable para atacar a la burguesía en el terreno socioeconómico y político y desarrollar la socialización de los medios fundamentales de producción, así como el asentamiento del poder popular; y eso ha facilitado que la burguesía pudiese levantar la cabeza e impulsar la guerra económica, política y militar que están llevando a cabo con la ayuda de los yanquis y los europeos. Esperemos que hayan aprendido la lección y que no sea demasiado tarde. Por otra parte, es realmente escandalosa la manipulación que vienen haciendo los media de aquí sobre los acontecimientos políticos que se vienen dando allí, aunque por otra parte es muy esclarecedor el apoyo que le están dando a la contrarevolución burguesa y sus crímenes.
(…) Sobre lo que comentas del juicio, yo no tenía ningún “petardo casero”, sino únicamente 800 gramos de polvo de petardos de feria o pólvora. El propio perito de la guardia civil tuvo que reconocer, al ser preguntado por mi abogado, que le faltaba una sustancia para ser explosivo. Y el piso donde me pillaron estaba lleno de esos petardos porque su dueño los vendía.
Lucio