La solidaridad, arma imprescindible entre los pueblos
Agenda
España, Estado multinacional
Lucha de clases y movimientos nacionales en España
Albino Artigues. Ed. Contracanto 1988.
«A diferencia de lo ocurrido en España, los Estados modernos que se van configurando en Europa Occidental lo hacen sobre la base de una burguesía que se ha fortalecido con la industria manufacturera y capitalista (…)
«No es este nuestro caso. La formación y posterior desenvolvimiento histórico del Estado español no se lleva a cabo por medio de ninguna revolución burguesa que fundiera en un todo único los diferentes pueblos peninsulares. Aquí, por el contrario, el Estado se forma únicamente en base al mantenimiento y reforzamiento del sistema feudal y a la integración en su ámbito territorial de unos pueblos, con una economía, una lengua, una cultura y unas costumbres plenamente diferenciadas. Sin embargo, aunque tarde y de manera desigual, el capitalismo comenzó a desarrollarse en España. Pero lo hace principalmente en la periferia, donde a través de las ciudades portuarias se ha ido gestando una burguesía comercial, lo que acentúa aún más las diferencias nacionales.
(…) Así han surgido la nación catalana, la vasca, la gallega y una cuarta nación formada por las regiones o antiguos reinos que han ido asimilando, en lo fundamental, la lengua, economía, costumbres, etc., de Castilla.
Es esta la nación castellana, aunque más frecuentemente, y como signo inequívoco de su “vocación” centralizadora, se la ha identificado con el conjunto del Estado, denominándola nación española.
«Por tanto, en España existen cuatro idiomas, cuatro economías, cuatro culturas… Son comunidades estables, históricamente formadas, donde una de ellas (la castellana), por su situación privilegiada, ha ejercido la hegemonía y la opresión política, económica, lingüística y cultural sobre el resto.
(…) «Sin embargo, el vigor, la resistencia históricamente demostrada por los pueblos oprimidos para reproducirse y adaptarse a los cambios sufridos durante siglos y para sobrevivir a la presión integradora, primero del reino castellano y hoy del Estado de los monopolios, todo esto solo puede comprenderse por el profundo sentido de la identidad étnico-cultural de estos pueblos, entendiendo esto como esa forma particular de ser y de sentir de las colectividades y que han ido conformando factores tan diferentes y complejos como son el idioma autóctono, los ámbitos de la infancia, la relación con la tierra, las costumbres y tradi ciones, etc.
Así, existe un territorio delimitado, propio y característico, en el que la comunidad de cada nación ha convivido, se ha asentado y formado históricamente.
(…) «España jamás ha existido como Estado nacional. España no es, pues, la “una e indivisible” que encarna el espíritu de las clases dominantes, sino un Estado multinacional formado sobre la base de la opresión de una nación sobre las otras».
Testigo de la historia:
–“Organizar el Frente Único de lucha en forma permanente y con carácter nacional, para dar batalla a la contrarrevolución: ¡Tal es el anhelo de las masas trabajadoras!”
José Díaz