Internacional:
Irlanda del Norte
-Más represión en Irlanda
La policía de Irlanda del norte vuelve a realizar otra redada en la sede central del partido independentista “Saoradh” en Derry y en otras asociaciones, como la de exprisioneros republicanos.
–https://nortedeirlanda.blogspot.com/2019/05/redada-del-psni-en-la-sede-nacional-de.html
–Despedida multitudinaria a Peter Rooney
El veterano combatiente del IRA irlandés Peter “Pepe” Rooney fue enterrado el 7 de mayo en un acto en el que varios encapuchados dispararon una salva de tiros en su memoria. Miles de personas asistieron a su entierro en uno de los funerales más grandes que se han visto en años.
Ulrike Meinhof
-Rescatando la memoria revolucionaria: homenaje a Ulrike Meinhof en Venezuela:
Al Pueblo de Venezuela, Al Gobierno Bolivariano de Venezuela, A los Pueblos y Gobiernos del Mundo, A los Medios de Comunicación Nacionales e Internacionales, A la Opinión Pública Nacional e Internacional, Al Mundo entero,
Hermanos y Hermanas:
Ulrike Marie Meinhof (1934-1976) apareció ahorcada en su celda de la prisión de Stuttgart-Stammheim, Alemania occidental. Se encontraba en una prisión de alta seguridad y en régimen de aislamiento desde su detención en 1972 junto al resto de los miembros de la Fracción del Ejército Rojo, llamada por el Estado banda Baader-Meinhof, entre los que se encontraban Holger Meins, Andreas Baader, Gudrun Ensslin, Jan Carl Raspe e Ingrid Schubert. Ninguno de ellos salió con vida de la cárcel. Todos murieron en sus celdas de aislamiento, «suicidados» por un Gobierno del Partido Socialdemócrata en coalición con el Partido Liberal. A Holger Meins le llegó la hora en noviembre de 1974. La hora llegó para Ulrike Meinhof el 9 de mayo de 1976, hoy se cumplen cuarenta años del suceso. El turno de Baader, Ensslin y Raspe llegaría en septiembre de 1977, y el de Schubert en octubre del mismo año. Los hombres murieron a balazos. Con las mujeres fueron más considerados: las ahorcaron. El exterminio de la Baader-Meinhof hacía honor a una larga tradición alemana. El Estado alemán, a lo largo de su Historia, pudo tolerar a regañadientes la disidencia individual o colectiva encauzada por el compromiso social. La disidencia intransigente, en cambio, al menos a partir de 1919, empezó a pagarse con la vida.
El Estado alemán occidental estaba infestado de antiguos dirigentes del Partido Nazi. No sólo los magnates como Thyssen, Krupp o Flick, que habían sostenido las finanzas de Hitler, seguían –y siguen– controlando la industria alemana, sino que los ministerios, las magistraturas, la Policía y los puestos de la Administración fueron ocupados por antiguos nazis: secretarios de Estado como Globke, ministros como Oberlaender, cancilleres como Kiesinger o presidentes de la República como Luebke habían sido dirigentes nazis. Como lo había sido Hans Martin Schleyer, presidente de la patronal alemana, que bajo el Tercer Reich había sido miembro de las SS, líder de la Liga Antisemita y saqueador de la economía de la Checoslovaquia ocupada. La ejecución de este gran patrón, Schleyer, por la Fracción del Ejército Rojo –que trató de canjearlo sin éxito en 1977 a cambio de la libertad para los presos supervivientes de Stuttgart-Stammheim– le costó la vida en su celda de aislamiento a Ingrid Schubert en octubre de ese año.
Colombia
-Terrorismo de Estado en Colombia: exterminio de los exguerrilleros y manipulación de la verdad tras la ‘Paz Sangrienta’
El atroz asesinato, precedido de tortura, contra el ex-guerrillero Dimar Torres por parte del ejército colombiano, nos convoca a cuestionamientos profundos acerca de si a la realidad objetiva de Terrorismo de Estado, corresponde seguir denominándola, en disociación absoluta, como “paz”. Dimar Torres iba a ser padre, era activista comunitario. Los militares lo torturaron, lo mutilaron, arrojaron su cuerpo desnudo y su pene amputado. Esto es el Terrorismo de Estado en Colombia: perpetrando exterminio para servirle al capitalismo transnacional.
EE.UU.
-Drogas de farmaceúticas…
John Kapoor, fundador de la farmacéutica Insys Therapeutics, fue condenado por un tribunal de Boston, por sobornar a médicos y aseguradoras para que prescribieran a sus pacientes, su aerosol Subsys, elaborado a partir de fentanilo. Las sobredosis, la prescripción indebida y el abuso del fentanilo de liberación rápida, el opioide más potente, ha puesto en alerta a la administración. El fundador de la farmacéutica, y otros cuatro directivos de la compañía, se enfrentan a penas de 20 años de cárcel por crimen organizado, esperándose nuevas demandas contra otras compañías, por que en los últimos 20 años se ha cobrado la vida de unas 400.000 personas en el país.