Entrevista con Pablo Hasél
En ‘El Otro País’, n.º 95, septiembre-octubre 2020
“La Monarquía nos saquea pero el delito es contarlo”
Por Andreu García Ribera
Este verano hemos podido hablar con Pablo Hasél el 11 de julio en Castelló en un concierto contra la represión y por la libertad de expresión y el 14 de agosto en una charla con recital de poemas en Campello, en la asociación Ni un pas enrede.
Este joven músico rapero y poeta sufre con especial saña el aguijón represivo de las togas. El 2018 el T.S. ratificó la pena de dos años prisión por enaltecimiento del terrorismo e injurias, a la Corona, el cumplimiento de esta condena quedó en suspenso, pero en junio de este año el Supremo ha confirmado una nueva pena de nueve meses y un día y multa por injurias a la Corona y a las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado. El 13 de agosto el Supremo’ le ha conminado al pago de los 20.000 euros de multa en el plazo de cinco días. Pablo tiene otras dos condenas en primera instancia que aún no son firmes.
-Pregunta.- Pablo ¿por qué no has bajado el pistón reivindicativo de tus letras estando en libertad por remisión de la pena y sabiendo que una nueva condena puede suponer tu ingreso en prisión?
Respuesta,- El éxito de la represión radica en la extensión del miedo y en su interiorización. Cambiar el tono de mis letras para satisfacer a la censura sería reconocerles el derecho a imponerme su pensamiento. Decir que el Borbón es un mafioso amigo de otros mafiosos, por ejemplo de las monarquías teocráticas del Golfo Pérsico no es una opinión es un hecho objetivo. No puedo autocensurarme por miedo a la prisión, llevo años cantando a los presos políticos del estado español, escribiéndome con ellos, callarme ahora sería una incoherencia. Si entró en prisión seré un preso político más del corrupto régimen del 78 con su podrida monarquía a la cabeza.
-P.- ¿Cuándo empezó a tejerse la madeja represiva contra ti y tus canciones?
R.- Empiezan sus pesquisas inquisitoriales a partir de las canciones en las que reconozco la existencia de presos políticos, una que les causó especial preocupación fue la titulada «Libertad Camarada Arenas». Es curioso ver como en mi primer juicio, la acusación se centra en las letras de una serie de canciones, pero no incluyen en las injurias a la monarquía «Los Borbones son unos ladrones», en cambio sí fueron objeto de acusación otras más suaves. Hicieron una selección bastante aleatoria, sobre la base de dos elementos: la protección de la monarquía y negar el derecho a la resistencia con todas las formas de lucha, algo que en su argumentarlo político-legal llaman enaltecimiento del terrorismo.
-P.- La policía arrasó tu casa en Lérida el 2011 ¿Cómo viviste esta violación domiciliaria?
R.- Vivía aún en casa de mis padres, 10 policías irrumpieron violentamente en el piso, revolvieron papeles, libros, anotaciones, se incautaron no sólo de mi ordenador sino también los de mis padres y me llevaron detenido. Fue una actuación desmedida que tenía por finalidad el amedrentamiento, objetivo que no consiguieron pues me convenció más si cabe de la realidad y justeza de mis denuncias. Te voy a contar algo personal, hasta ese momento tenía muchas discusiones con mi madre, votante del PSOE, cuando le hablaba de la tortura y de la represión, ella me decía que eso no pasaba aquí pues vivíamos en una democracia. Después del allanamiento de la casa, mi madre se ha convertido en una firme defensora no sólo de su hijo sino de sus ideas. Hoy es para mí un importante sostén.
-P.- Hay gente que piensa que con la llegada del gobierno de progreso PSOE-Unidas Podemos hay posibilidades de cambio desde las instituciones. ¿Qué opinas?
R.- Lo del gobierno de progreso es un mantra que no comparto. Hay que juzgarlos por sus actos no por sus declaraciones. ¿Qué han hecho? Se han olvidado de la derogación de la reforma laboral; la Ley Mordaza no sólo está en vigor es que además están abriendo más expedientes sancionadores a su amparo que el anterior gobierno del PP; se niegan a investigar públicamente las actividades ilícitas de la Casa Real; apoyan sin fisuras a la OTAN, de hecho el jefe del gabinete de Pablo Iglesias es Julio Rodríguez, un teniente general del Aire que planificó los bombardeos de la Alianza Militar contra Libia; venden armas y navíos a dictaduras sanguinarias como la de Arabia Saudí y además amparándose en la Ley de Secreto Oficiales del franquismo blindan la investigación sobre los contratos de adjudicación.
Te pongo un ejemplo muy gráfico de su subordinación a los poderes económicos, la ministra de Trabajo y Economía Social Yolanda Díaz ha alabado públicamente al empresario Amando Ortega por su capacidad para crear empleo. Yo añadiría empleo negro infantil en Bangla Desh. Que una ministra del PCE haga este tipo de manifestaciones es un ejemplo del camino de renuncias del gobierno por un lado y de la degeneración del revisionismo eurocomunista por otro.
-P.- ¿Podemos ha sido funcional al sistema capitalista y al régimen del 78?
-R.- Cuando estalla la crisis capitalista de hace 10 años, la gente sale a la calle gritando «PSOE-PP la misma mierda es», hay un sentimiento profundo de desafección con un sistema político que ha trabajado al servicio de la banca y de las grandes constructoras, que inyecta miles de millones de euros al sistema financiero para salvar a los banqueros, mientras cientos de miles de familias obreras son desahuciadas de sus viviendas por no poder pagar las hipotecas, jubilados que pierden los ahorros de toda su vida estafados por banqueros sin escrúpulos que inventaron triquiñuelas como la inversión en deuda subordinada o las preferentes. En este contexto surge el movimiento 15M con la consigna generalizada de «no nos representan».
Podemos recoge este inmenso cabreo y lo reconduce hacia unas instituciones que hacían agua, deslegitimadas en el marasmo de una brutal corrupción de las élites políticas. Con la promesa de un cambio a través de las instituciones pide el voto en las urnas y vacía las calles. Juega el mismo papel desmovilizador que el PCE en los años 70. Podernos ha pasado de decir que el PSOE es un partido del sistema corrupto a gobernar en coalición con él y apelar a conceptos huecos como la unidad de la izquierda. ¿Qué izquierda? La que continua con los desahucios, la que no cuestiona la OTAN, la que mantiene la legislación laboral del PP, la que inclina la cerviz ante los Borbones y permite que uno de los mayores ladrones del país se escape a los Emiratos Árabes. Unidos, con escolta policial incluida.
-P.- Dijeron que llegaban para cambiar desde el Gobierno y es el Gobierno quien los ha cambiado de arriba abajo. Un proceso de degradación política acompañado de un proceso de degradación personal.
-R.- Te voy a contar una anécdota que refleja esta involución en la persona de Pablo Iglesias. Tanto Valtonyc corno yo trabajábamos en el programa La Tuerka que dirigía Iglesias. Nos pedía que grabásemos algunas canciones para emitirlas antes de la tertulia y nos pedía que fueran lo más «cañeras» posible. La letra de una de estas canciones emitida en La Tuerka ha figurado en la causa que le ha costado a Valtonyc la condena de tres años y medio y le ha forzado al exilio en Bélgica. Aún está esperando Valtonyc una declaración o una llamada siquiera, del actual Vicepresidente del Gobierno y antiguo solicitante de raps «cañeros».
-P.- ¿Cómo fue tu toma de conciencia antifascista y anticapitalista?
-R.- Desde muy joven me impresionó la distancia entre la arcadia feliz en la que nos decían que vivíamos y lo que veía en las calles: desahucios, precariedad laboral, paro, emigrantes sin papeles en la época de la fruta hacinados en infraviviendas, ancianos sobreviviendo con pensiones míseras. Buscando los porqués encontré a Marx, a Lenin y especialmente a luchadores encarcelados con toda una vida de resistencia, dignidad y represión sobre sus espaldas. Descubrí la historia y las tesis del PCE(r).
-P. ¿Sabes que eres un icono para muchos jóvenes?
-R.- Lo que interesa no es construir iconos, es que la juventud conozca una historia de resistencia comunista y que enlace con su teoría y su praxis. Que cada generación no tenga que empezar desde cero su comprensión de la sociedad y de la política.
-P.- Muchos tertulianos, políticos, jueces, fiscales, periodistas están preocupados por los límites de la libertad de expresión. ¿Qué te parece su preocupación?
-R.- Quieren limitar algo que no existe, la libertad de expresión para los sectores populares. Quienes se mueven dentro de los parámetros del régimen del 78 sí gozan de libertad de expresión, para ello tienen sus medios de comunicación fuertemente financiados por fondos de inversión, bancos y empresas. Pero cualquier punto de vista contrario a los cánones de la ideología dominante es reprimido. Somos quince los raperos condenados a penas de prisión por cantar, ningún país europeo tiene tal cantidad de artistas condenados. Incluso en EE.UU, que en absoluto es mi modelo, existen raperos con letras mucho más duras que las mías y ninguno ha sido juzgado por ello. Siempre pongo el ejemplo del poeta Maiakovski quien estuvo en la Rusia zarista dos años en prisión por militar con los bolcheviques, yo estoy condenado a más de cinco años de prisión por hacer canciones. Es un contrasentido, la monarquía nos saquea pero el delito es contarlo. Mientras el emérito busca para refugiarse dictaduras teo-cráticas sin tratados de extradición.
-P.-. Cambiando de tercio, estuviste en Cácuta en febrero de 2019 en un recital solidario con la revolución bolivariana asediada por el imperialismo. ¿Qué recuerdas de esta experiencia?
-R.- Sí, el 22 de febrero el imperialismo dentro de una estrategia de intervención militar con la coartada de la ayuda humanitaria organizó un recital, llamado Venezuela Aid Live, en el puente internacional de Las Tenditas en el lado colombiano, con fuerte apoyo financiero y material de ese estado narco paramilitar, con nueve bases yanquis, que se llama Colombia. En el lado venezolano actuamos en un recital de apoyo a la revolución bolivariana cantantes de diversos lugares, unidos por el común denominador del internacionalismo antiimperialista. Finalmente la invasión revestida de música y camiones de «ayuda humanitaria» repletos de armas fue abortada. Los artistas pusimos nuestro pequeño granito de arena, pero vivimos momentos de gran intensidad. Recuerdo que por la noche al regresar por una carretera flanqueada de impresionantes barrancos, uno de los autobuses del ministerio de cultura que nos transportaba fue agredido a pedradas por grupos fascistas organizados y que son bastante numerosos en el estado fronterizo de Táchira. El conductor podría haber perdido el control, lo que hubiera sido fatal teniendo en cuenta los abismos por los que serpenteaba la carretera. Al final llegamos sanos y salvos, pero fue una tensión grande porque no sabíamos cómo estaba la situación en la frontera, Lo que no olvidaré tampoco es a las figuras internacionales que dieron su apoyo mercenario a esta intentona de golpe fascista, entre otros Juanes, Maluma, Miguel Bosé, Alejandro Sanz…
-P.- ¿Por qué no te has exiliado para evitar la prisión como ha hecho Valtonyc?
R.- No crítico la decisión de Valtonyc, pero en mi caso evalué la situación detenidamente y concluí que le hacia más daño al Estado ingresando en prisión que exiliándome, que tendría mayor repercusión en la opinión pública un rapero encarcelado por sus letras. Y me parece que no me he equivocado, en mi primera condena me prohibieron salir del territorio nacional, en esta segunda no. Es más, he salido dos veces sin ningún impedimento a Bélgica y a Venezuela. En uno de los viajes la policía me saludó sin haber presentado ningún documento, me dijeron «hola Pablo te vas de viaje». Sabían perfectamente que me iba e intuyo que deseaban que me fugara, desde luego me lo pusieron muy fácil.
-P.- ¿Ha merecido la pena esta rebeldía que te puede llevar a la cárcel?
-R.- A esta pregunta te contestaré con las reflexiones de un poema de Manuel Pérez Martínez, Secretario General del PCE(r) preso desde el año 2000 y que anteriormente estuvo otros 7 años preso. Actualmente está encarcelado en Albocasser, en Castelló, El poema se titula «Mereció la pena» y dice más o menos:
Me preguntas si mereció la pena y no sé qué decirte, No estoy penando pena grande es estar sometido a la ley del salario, pero cuando descubrí la ley de la esperanza, se me fueron todas las penas, decidí romper la tristeza y se me fueron todas las penas, con los cómo y los cuándo porque conocía los por qué.
Si esto lo dice un hombre, comunista desde los 14 años, que en noviembre cumplirá 76 años y le aguarda aún una larga condena, qué quieres que te responda, pues que hay que conocer los por qué.