Memoria histórica imprescindible:
-Las mujeres campesinas que hicieron de Meirás el centro de las revueltas agrarias contra el fascismo en la República
El desahucio de dos familias de las fincas que cultivaban en los terrenos del Pazo motivó entre 1933 y 1936 una poderosa rebelión contra la oligarquía, la Iglesia Católica y el poder de la derecha protagonizada por las mujeres del pueblo.
Y lectura del texto “Meirás rebelde: un conflito agrario na Galicia da Segunda República”, de Manuel Pérez Lorenzo.
–https://www.publico.es/sociedad/memoria-historica-mujeres-campesinas-hicieron-meiras-centro-revueltas-agrarias-contras-fascismo-republica.html?utm_source=telegram&utm_medium=social&utm_campaign=web
-El batallón Thälmann
Éste es nuestro momento.
Nos podéis oír cantar
donde la tierra es frágil bajo el sol del sur.
Contempladnos marchar en filas
apretadas hacia la muerte que es nuestra gloria,
hacia el espíritu indómito de nuestro país mancillado.
Porque estamos aquí para mostrar al mundo la otra cara de nuestro país, y la voz
-que se ha silenciado durante tres años en Alemania-
expande sus canciones de libertad bajo un sol extraño.
Nos unimos en Barcelona a las masas que tomaron al asalto
la plaza de Colón;
fuimos con la primera milicia al Frente del Este;
luego a Madrid;
estuvimos en la Casa de Campo, Guadalajara, Brunete, Belchite y Teruel,
derrotando a los italianos en nombre de Thaelmann.
Aquí hemos mostrado al mundo la otra cara de nuestro país;
no la del verdugo de barba hirsuta,
sino la de la juventud que marcha unida cantando
por las llanuras del sur, donde la arcilla se resquebraja bajo el sol.
Aileen Palmer. España, 1938
-«Fue casi un deber moral»: la historia de los centenares de argentinos que lucharon contra Franco
Casi tres años de combate en los que no solo participaron oriundos del país. También acudieron de otras partes del mundo. Entre los distintos lugares, Argentina ocupa un lugar especial.
«Recorriendo los caminos / Firme el paso, alto el frente / Hacia un mundo renacido». Versos con los que Luis Alberto Quesada recitaba a la contienda. El poeta nació el 22 de agosto de 1919 en Lomas de Zamora, a las afueras de Buenos Aires. A los pocos años, recaló en España, país del que eran originarios sus padres. Cuando cumplió los 16, estalló la guerra. Él se enroló a las milicias antifascistas que batallaban por la República.
Fue sargento, comisario político y capitán durante los años de pugna civil. Al vencer el bando franquista, cruzó a Francia, donde fue internado en un campo de concentración. El argentino participó en la resistencia contra la ocupación alemana hasta que fue detenido y enviado a Madrid. En los sótanos del Ministerio de Gobernación fue sometido a palizas y noches enteras de focos sobre la cabeza. Quesada caminó entre la vida y la muerte en los 13 años que pasó en prisión, antes de volver a su lugar de nacimiento. Una historia compartida con centenares de argentinos.
-De Otxandio a Legutio pasando por Gernika: los 2.000 bombardeos en 400 días de Guerra Civil en Euzkadi
Un estudio analiza los bombardeos fascistas en Euskal Herria desde el golpe de estado del 18 de julio. Mientras el fascismo contaba con aviación de última generación, y realizó las masacres de Gernika, Otxandio, Durando… la República llegó a bombardear con piedras el cuartel fascista en Legutio.
Las operaciones fueron muchas más y más sanguinarias en el bando franquista (91%), que contó con el apoyo de la aviación de la Alemania nazi y de la Italia fascista.
«De los 2.042 bombardeos, 1.870 (el 91,5%) fueron operaciones franquistas. El resto, 172, bombardeos republicanos. Los 300 considerados como ataques “de terror” fueron 292 y 8, respectivamente.»
-Homenajes en Alemania, «Pasar página» en España:
El embajador de Alemania en España, Wolfgang Dold, ha rendido homenaje a los 140.000 refugiados republicanos de la Guerra Civil que fueron forzados a trabajar en distintos puntos del continente europeo por el III Reich.
–https://diario16.com/alemania-homenajea-a-los-140-000-refugiados-republicanos-victimas-del-nazismo-mientras-casado-insiste-en-dejar-enterradas-las-heridas-del-franquismo/