Araceli Pérez Darias, heroína de la Revolución Sandinista. Torturada y asesinada en 1979 por la Guardia Nacional, con 33 años de edad.

Foto. Araceli Pérez Darias.

Mujeres luchadoras y sabias

que quizás no conocías

Agenda.

Araceli Pérez Darias

España 1945 – Nicaragua 1979

Esta mexicana, nacida en España, reposa orgullosamente entre los héroes y heroínas de la Revolución Sandinista por la cual dio su vida en abril de 1979.

El 7 de julio de 1979, integrantes del Frente Occidental del Frente Sandinista de Liberación Nacional (FSLN) entraron triunfantes en la ciudad de Managua. Iban montados en una tanqueta bautizada con el nombre de “Araceli”.

Inmortalizada por sus compañeros de lucha en este símbolo de la liberación, Araceli Pérez Darias fue un ejemplo de entrega y firmeza internacionalista. Hija de un matrimonio español emigrado a México, de arraigada educación católica y cuyo padre había servido a Franco durante la Guerra Civil Española, era una acomodada psicóloga de 30 años cuando decidió incorporarse a la guerrilla nicaragüense.

En la ciudad de México, formó parte de los círculos de estudio de “Espartaquismo Integral” para, más tarde, participar en el Comité Mexicano de Solidaridad con Nicaragua (1975). Ofrecía su apartamento como casa de seguridad a los dirigentes del FSLN.

Bajo el seudónimo de Argentina, a mediados de 1977 se trasladó a Honduras, donde recibió preparación militar; se encargó de coordinar los colaboradores del frente, manejó casas de seguridad, fue correo con Costa Rica y Panamá y se responsabilizó de la educación política de sus compañeros. Entró en Nicaragua para incorporarse a “la ofensiva de octubre del 77” y participó en varias acciones militares.

Regresó por un corto periodo a México para despedirse de los suyos y, a principios de 1978, de nuevo en Nicaragua, donde adoptó el nombre de guerra de Pilar. El Frente Occidental y la Dirección Nacional le encargaron del trabajo clandestino en la ciudad de León, con miras a la insurrección final. En 1979 entró a formar parte del Estado mayor del Frente Occidental, responsable de organizar la insurrección final en esa parte de Nicaragua.

El 16 de abril de 1979, los miembros del Comando Regional estaban reunidos en una casa de seguridad en los suburbios de León, cuando, acompañados por un informante, 80 militares de la Guardia Nacional rodearon la manzana e irrumpieron en la casa. Los hombres, identificados por el traidor, fueron ejecutados en el acto; Idania y Araceli fueron arrestadas y llevadas al Fortín de Acosasco donde fueron torturadas y asesinadas. Ana Isabel, quien se hizo pasar por empleada doméstica, fue la única sobreviviente. El silencio de las dos combatientes permitió que no se desmantelara la insurrección en la zona occidental de Nicaragua.

Dos meses después de sus muertes, León fue el primer territorio liberado por las fuerzas sandinistas.

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

Este sitio usa Akismet para reducir el spam. Aprende cómo se procesan los datos de tus comentarios.