Muro de denuncias:
Terror de Estado 1936-2024:
-Asociaciones de víctimas de la violencia de Estado considera una “humillación” la Medalla de Oro al Memorial de Víctimas de Gasteiz.
15 asociaciones de víctimas de la violencia de Estado rechazan que el Memorial de Víctimas del Terrorismo reciba la Medalla de Oro de Vitoria-Gasteiz.
Para la plataforma Memoria Osoa, que une a las 15 asociaciones, es «una humillación y afrenta que una institución pública galardone la discriminación y exclusión que impulsa el memorial».
Las entidades creen que esta decisión tomada por el Ayuntamiento de Vitoria-Gasteiz el pasado mes de julio «no contribuye para nada a la convivencia».
El Memorial está dedicado únicamente a las víctimas del terrorismo, incluso a dirigentes fascistas ejecutados en la dictadura, pero excluye a las víctimas que ocasionó la policía y el terrorismo de Estado.
Según Memoria Osoa, que une a las 15 asociaciones, la discriminación se debe a que la fundación «utiliza el sufrimiento de una parte de las víctimas para ahondar en el discurso que niega la existencia de las provocadas por la violencia y el terrorismo de Estado».
Y es que las asociaciones son «conscientes de que el objetivo principal que persigue la Fundación del Memorial responde a una necesidad estratégica, que se ubica en la imposición del relato oficial sobre la verdad y la violencia».
La plataforma ha reiterado «la necesidad de seguir construyendo convivencia sin exclusiones para lo cual es imprescindible el reconocimiento oficial y la visibilización de las miles de víctimas que todavía carecen del mismo».
Mientras se excluye del Memorial por ejemplo a las víctimas del 3 de Marzo, como los 5 obreros asesinados por la policía en 1976 en esa misma ciudad, cada mes de agosto se homenajea a un torturador y colaborador de la Gestapo como Melitón Manzanas, ejecutado por ETA en 1968.
Por contra, la alcaldesa Maider Etxebarria, por su parte, ha lamentado que las asociaciones critiquen esa concesión: «Yo respeto todas las opiniones, pero me da tristeza pensar que todavía hay mucha gente que tiene un recorrido ético todavía muy grande por delante por hacer». Lo dice ella, del PSE-PSOE, aquel que montó el GAL.
-Denuncia de 2018 sobre el Centro Memorial de las Víctimas del Terrorismo.
La balconada del Banco España de Gasteiz que aún hoy chorrea sangre.
El Centro Memorial de las Víctimas del Terrorismo en Vitoria-Gasteiz está instalado en el edificio del Banco de España.
Con su corta memoria sobre lo que ha sido el terrorismo, y casi como insulto en la propia Vitoria negando presencia a los 5 trabajadores asesinados por la policía en marzo de 1976, negarán incluso los infaustos momentos del propio edificio. De cuando se destiló odio, venganza, muerte, desde la balconada del que va a ser el Centro Memorial.
¿Reservarán sitio y pondrán una placa sobre ello?: Acompaño transcripción del libro «Relatos de brasero», de Emilio Pérez de San Román. Editado por el propio Ayuntamiento de Vitoria-Gasteiz en 2005. Pág 80 y 81.
«Millán Astray estuvo en Vitoria el 23 de agosto de 1936. A las cuatro y media de la tarde llegó y pasó revista a las tropas en los solares todavía sin edificar de los cuarteles. Luego se sube a la balconada trasera del Banco de España».
«Parece que está drogado. O que padece algún tipo de esquizofrenia ya que a veces parece identificarse con el Dios premiador de buenos y castigador de malos. En su discurso dijo cosas como éstas: ‘En las vascongadas entre todos los venenos ha nacido una lepra que se ha unido a los comunistas y son los nacionalistas. Espero que arrepentidos y llorosos vendrán a decir: Patria, yo pequé. Te pido humildemente perdón. Llévanos en tu seno. Quiero ser el primero en morir defendiendo la bandera intangible de la Patria. Aquellos que hubieran sentido alguna concomitancia con el nacionalismo vasco o con otras sectas y no estén incursos en delitos de pena de muerte que besen la bandera. Unos como homenaje. Otros como rendición de sus pecados. Que nadie tenga miedo, que yo lo perdono si besa esa enseña y no ha cometido crimen’. Tiene a Oriol a su lado. Y prosigue: ‘Ahora vamos a besar la bandera. Todo aquel que haya pertenecido a alguna de esas asociaciones o nacionalismo que pase sin rubor y sin temor a besar la bandera y a dormir tranquilo porque al pensar que ya no se es ningún asesino, ni se está de acuerdo con los asesinos, y que ama a su Patria’».
«Y acto seguido empieza la purificación. Al primero a quien se da a besar la bandera para que duerma tranquilo por la noche es al Sr. Obispo porque el general le ha perdonado sus pecados. Luego invita a todos a ir a la estación porque pasa un tren con una Bandera de la Legión para tomar el fuerte de San Marcial. Y se lleva al Obispo en la cabeza de la manifestación para que al paso bendiga la bandera de los legionarios. Durante el trayecto, señoritas vitorianas iban colgando a todo pichipata que encontraban al paso escapularios y medallas. Después de la estación se va a la Diputación donde tenía un discurso preparado para los trabajadores. Aquí el delirio del general es de camisa de fuerza: ‘Se os llevaba por el mal camino y se os condenaba al triste dolor, a dormir por la noche diciendo ‘Soy un asesino’. Y a clavaros las uñas en vuestro pecho diciendo ‘ya no tengo perdón, soy un asesino’. Y a pensar que cuando beso a la mujer que amo, los labios que la besan son de asesino. Para vosotros no hay fulminación. Gritad ‘Viva España y Viva la Muerte’. A los que no tengáis culpa, a los que no cometiendo crímenes, incendios, ni ningún otro pecado, hayáis pertenecido a esas sociedades, hayáis sido nacionalistas, al venir a este acto, quiero que lo digáis a los que no están aquí. Os digo que no podréis sufrir pena de muerte por las penas anteriores a no ser que hayáis cometido crímenes u otras cosas’».
Sólo añado una cosa y ejemplo de la enseñanza de Millán Astray a sus correligionarios en eso de verter muerte, Columba Fernández, vecina de Gasteiz, fue cuneteada el 17 de septiembre.
Pequeños detalles olvidados en el Memorial:
-Un criminal orgulloso en Vitoria, Bruno Ruiz de Apodaca, carlista, 108 asesinatos.
Bruno Ruiz de Apodaca Juarrero fue un militante carlista que durante la Guerra Civil de España dirigió un escuadrón de la muerte autor de numerosas ejecuciones extrajudiciales en la provincia de Álava.
Ruiz de Apodaca llegó a ser muy conocido por haber dirigido la mayor parte de los «paseos» durante los que se fusilaron numerosos presos extraídos de las cárceles en manos del bando fascista.
Durante la noche del 18 de julio de 1936, Apodaca se apostó delante del Gobierno Civil de Álava, donde fue tomando nota de los movimientos de los posibles opositores al golpe de Estado. Después, actuó principalmente en ejecuciones extrajudiciales.
Bruno Ruiz de Apodaca nunca mostró arrepentimiento por sus actos represivos, al contrario: solía jactarse de haber matado a 108 personas él solo.
En muchas de esas matanzas la mayoría de las veces participó otro asesino del régimen, el guarda vitoriano Anuncibay…
–https://cronicasapiedefosa.wordpress.com/2016/10/29/bruno-ruiz-de-apodaca-asesino-franquista-alaves/