La dirigente comunista palestina Khalida Jarrar, recluida en una celda de aislamiento en la prisión “israelí” de Damon / Chevron, BP, ExxonMobil y Shell ponen la gasolina del genocidio en Gaza.

Cartel libertad Khalida Jarrar.
Tras una de sus detenciones, llevada a hombros.
Material solidaridad presos políticos.
Fuel es sangre palestina.
Barco Overseas Santorini.

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